Desde Abuelas de Plaza de Mayo expresamos nuestro repudio a los agravios y falacias que la candidata a vicepresidenta por La Libertad Avanza, Victoria Villarruel, vertió sobre la figura de nuestra presidenta, Estela de Carlotto, y sobre el proceso de memoria, verdad y justicia que la sociedad argentina supo construir en estos 40 años de democracia.
Los genocidas argentinos cometieron crímenes de lesa humanidad, es decir crímenes contra la humanidad. Un tipo de crimen tan aberrante y pernicioso para el conjunto de la sociedad que es considerado imprescriptible: no importa el tiempo que pase desde que se haya realizado, siempre deberá ser juzgado y condenado, para que la sociedad no lo repita.
Los hechos que ocurrieron en nuestro país durante el terrorismo de Estado, que se inició con la Triple A, previo al inicio de la última dictadura cívico-militar, son reconocidos como crímenes de lesa humanidad por la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación desde 2003.
A los agravios, respondemos con verdad
Expresamos nuestro repudio a las falacias vertidas sobre la figura de nuestra presidenta, Estela de Carlotto, y sobre el proceso de memoria, verdad y justiciahttps://t.co/9Ejew30SVZ pic.twitter.com/N5oLMU0Lbc
— Abuelas Plaza Mayo (@abuelasdifusion) September 5, 2023
Lo que hacen Villarruel y su espacio político es una provocación para ganar notoriedad sobre temas superados por la sociedad argentina y convalidados por la justicia nacional e internacional. Su discurso nos retrotrae a lo peor de nuestra historia, intenta sembrar confusión y promover el odio entre los argentinos.
Tengamos memoria: no permitamos que el olvido ni los discursos que banalizan los crímenes de Estado se amplifiquen, porque es un peligro para la democracia. No queremos que haya nunca más un genocidio en Argentina, por eso nuestra preocupación.
https://abuelas.org.ar/noticia/a-los-agravios-respondemos-con-verdad-1831
Porque queremos que nuestra juventud camine y se reúna libremente en las plazas y en los barrios, que tenga derecho a la educación y a la salud, que sus vidas sean respetadas y valoradas sin importar su opinión, sus gustos, su condición social o nacionalidad. La libertad es con garantía de derechos. Sin derechos, la libertad es solo de unos pocos.
Estela lleva más de 40 años buscando justicia por los crímenes de la dictadura de forma pacífica, jamás con venganza. Junto a sus compañeras, ha velado siempre por la democracia, respetando la pluralidad de expresiones y acompañando el reclamo de los sectores postergados.
A los agravios siempre responderemos con verdad, organización, amor y lucha. Nunca más.