Atentado contra Salman Rushdie, su estado es grave. El escritor Salman Rushdie se encuentra con respiración asistida en un hospital de Estados Unidos tras ser acuchillado el domingo, en una localidad del Estado de Nueva York. La Casa Blanca calificó el ataque de «reprobable y chocante» Francesca Sabatinelli – Ciudad del Vaticano
Salman Rushdie, que fue agredido anoche durante una conferencia en el escenario de la Chautauqua Institution, en el Estado de Nueva York, se encuentra hospitalizado en un hospital de Pensilvania. El escritor indio nacionalizado británico, de 75 años de edad, fue operado de urgencia durante varias horas, tras las heridas de cuchillo que le infligió en el abdomen, el cuello y el hígado Hadi Matar, de 24 años, quien fue detenido inmediatamente después del ataque. Rushdie, que actualmente está conectado a un respirador artificial y no puede hablar, sufrió daños en el hígado, se le cortaron los nervios de un brazo y corre el riesgo de perder un ojo.
La fatwa de Jomeini
Todavía se desconoce la motivación del ataque. La policía y el FBI están investigando para averiguar la posible implicación de terceras personas, cómplices de Matar, nacido en California y considerado cercano al extremismo chií y simpatizante de la Guardia Revolucionaria Islámica iraní, lo que hace pensar en un atentado por motivos religiosos.
Desde hace más de 30 años, desde la publicación de su libro «Los versos satánicos», considerado blasfemo por una parte del islam, Rushdie había sido objeto de una fatwa iraní emitida por el ayatolá Jomeini, que había ofrecido una recompensa de tres millones de dólares por su muerte.
Reacciones
No hubo ninguna reacción oficial de Teherán, mientras la prensa iraní ensalzó al agresor de Rushdie. El mundo literario y gran parte de la comunidad internacional han expresado su solidaridad. La Casa Blanca calificó el ataque de «reprobable y chocante».
Este sábado, Rushdie volvió a respirar por sí mismo, luego de que los médicos le retiraran el ventilador que le brindaba respiración asistida. Wylie también precisó que el escritor habló por primera vez tras el ataque del viernes.
Según la información aportada por Wylie, el ataque lesionó los nervios de uno de sus brazos, le afectó el hígado y es «probable» que le cause la pérdida de un ojo.
La familia está «extremadamente aliviada» de que haya dejado la respiración asistida y dicho «unas pocas palabras», señaló desde Londres su hijo Zafar en Twitter «Mi padre aún se encuentra en estado crítico en el hospital y está recibiendo un tratamiento intensivo y continuo», añadió
«Estamos extremadamente aliviados de que ayer le quitaran el respirador y pudiera decir algunas palabras», continuó e indicó que, pese a la «gravedad» de unas lesiones «que le cambiarán la vida», «su sentido del humor peleón e insolente se mantiene intacto».
El escritor, de 75 años, fue atacado en público el viernes pasado, momentos antes de intervenir en un acto literario.