La flamante ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, brindó detalles claros y estadísticos de la situación real que atraviesa la insostenible posición de los movimientos sociales administrando los recursos que el estado destina para apoyo o ayuda de los mismos administradores, Movimiento Evita y movimientos sociales.Desde Casa Rosada, siguieron con mucha atención la valentía de la contadora pública ex diputada nacional, que brindó un desarrollo en una conferencia de prensa que revestía definidamente la única salida posible de colocar un manto de silencio al marco de las denuncias públicas por las irregularidades en la asignación de beneficiarios del plan potenciar trabajo y sus irregularidades e inconsistencias en general.
En evidente estado de enojo por las realidades plasmadas en la primera parte de los resultados correspondientes a los controles y normalización del desorden ocasionado por los comandados de Emilio Pérsico y aliados, Tolosa Paz, puso la cara para defender la unidad con el compromiso de corregir errores, pero con los mismos administradores .
Quedó muy en evidencia en la conferencia de prensa que los movimientos sociales provocaron un desastre administrativo que alcanza a un 3% de lamentable relato, que va desde beneficiarios que apostaron al dólar ahorro hasta, tarjetas de crédito, propiedades y hasta fallecidos.
La contadora pública nacional, no explico quien administrará ese recupero de 3 % de defalco o descontrol y mucho menos quiso aclarar cuál es futuro de los movimientos sociales al frente de la economía popular.
Un detalle que el país observó enmudecido es que con ese 3% se podría haber solucionado, tantas necesidades de los que realmente necesitan, o mínimamente incluir a los únicos vulnerables que para Todos, todavía están afuera de ser considerados argentinos.
La actualidad nos obliga a conectar a Emilio Pérsico de modo directo con las acciones políticas que se determinan en el frente de todos , como la mínima participación del movimiento Evita en el acto del día de la Militancia.
De tal modo es de vergonzoso el momento que se notó demasiado la desvinculación de Grabois con la expulsión de Rafael Klegzer, a quien se le pidió la renuncia para evitar más desgaste.
Lo que si queda claro, es que Emilio Pérsico será observado con un control específico, en vistas de que comienzan las auditorías en general con un nuevo formato de validación de identificación a través de nadie sabe quién.