El programa oficial, que se extiende también otros rubros y contempla una pauta de incrementos de hasta 5% mensual, está vigente hasta el 31 de diciembre pero el recambio de Gobierno desincentiva su cumplimiento.
Se estima que la Secretaría de Comercio comenzará a reunirse desde hoy con las empresas productoras y comercializadoras para buscar una transición ordenada sin embargo de caerse esos acuerdos, habrá un impacto inmediato los bolsillos.
El lunes a la noche comenzaron a recibir listas o avisos de incrementos con rangos que van desde el 9% al 45 por ciento. Los primeros en aumentar fueron productos de almacén: gaseosas, algunos alimentos secos, limpieza e higiene personal.
“Las entregas están supeditadas a la aceptación de las nuevas listas de precios. Si no los aceptás, no te entregan”, afirman desde las comercializadoras.
Las empresas alimenticias cumplieron en los últimos tres meses con el tope de aumentos aún que señalaban el acuerdo como “insostenible” aduciendo atraso de sus precios frente a las variaciones que tuvieron sus costos durante el período. Como los productos llegan a las grandes superficies, en muchos casos se observan diferencias en torno al 30% con los que se encuentran en comercios de cercanía.
Una pista del rumbo en materia de precios podría darse este martes, luego de la reunión con la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), la central de entidades alimenticias de la Argentina, que preside el también titular de la Unión Industrial Argentina (UIA) Daniel Funes de Rioja.